Los retos de Adolfo Mota en educación

Por Álvaro Belin Andrade




Adolfo Mota Hernández se ha convertido en el nuevo secretario de Educación de Veracruz.

Con el nombramiento hecho en su persona por el gobernador Javier Duarte de Ochoa se ha dejado a un lado el largo periodo de incertidumbre que significó la presión ejercida por el SNTE para nombrar en su lugar a uno de sus exdirigentes seccionales, si bien tendrá el murmullo persistente de la poderosa organización desde la trinchera más cercana, la subsecretaría de Educación Básica.

El ex diputado local y federal, quien a principios del gobierno saliente de Fidel Herrera se desempeñó por breve tiempo como subsecretario de Educación, ha pasado a una posición de relevancia, no sólo por la materia de que se hará cargo, la educación, sino también por manejar el mayor porcentaje del presupuesto estatal.


Aunque son datos previos a lo que apruebe el Congreso local, sumando las asignaciones a dependencias públicas, organismos públicos descentralizados, fideicomisos públicos e inversiones gubernamentales orientadas al tema, la educación dispondría en 2011 de recursos cercanos a los 33 mil millones de pesos, cerca del 43 por ciento del presupuesto total.

Y de esos 33 mil millones, la SEV administraría directamente cerca del 87 por ciento. Si además, excepción hecha de los casi 3,700 millones de pesos que se asignan a la Universidad Veracruzana, sumamos los que tendrá bajo su observación como cabeza de sector, ya podemos imaginar el enorme potencial que puede desplegar quien ya está al frente de la dependencia.

El diligente coatepecano tendrá como uno de sus mayores retos mantener e, incluso, elevar los niveles de aprovechamiento escolar que ha logrado el sistema educativo veracruzano en las evaluaciones que aplican organismos nacionales e internacionales.

En sus manos estará hacer que Veracruz ponga la pica más alta en el mapa educativo nacional.

Lo primero que se le presentará en la agenda será elegir a un buen grupo de mariscales de campo que le permita aprovechar al máximo las sinergias creadas; un grupo que permita establecer estrategias y programas innovadores que influyan positivamente en los programas normales.

Ya el gobernador Javier Duarte de Ochoa ha puesto en claro, aunque en términos generales, los principales derroteros en materia de educación.

Uno de ellos tiene que ver con el aprovechamiento de las nuevas tecnologías, no sólo para apuntalar servicios en materias tales como comunicación, salud, administración pública y seguridad, sino fundamentalmente en educación, con programas como la Red Estatal del Conocimiento (REC).

En este sentido, cobra relevancia el hecho de que el gobierno federal, a través de las secretarías de Comunicaciones y Transportes (SCT) y de Educación Pública (SEP), hayan hecho una inversión millonaria para la utilización de 33 mil kilómetros de su red de fibra óptica para la distribución de internet mediante tecnología wi-fi, cuyo objetivo es aprovechar este recurso a favor de la educación.

Hay que recordar que Veracruz fue pionero en la propuesta de instalación de dispositivos para internet inalámbrico en las antenas de C-4 de la Secretaría de Seguridad Pública, que permitirían la democratización en el acceso a estas herramientas sobre todo en comunidades rurales marginadas.

Duarte dijo en su discurso inaugural muchas veces “como nunca”. Y en el caso de educación se refirió al apoyo que como nunca se le dará, no sólo mediante el impulso de la REC sino también de otros programas que buscan mejorar el aprendizaje, el conocimiento y el bienestar de los más de un millón de estudiantes de todos los niveles.

Aunque es posible que no lo haya escuchado, pues llegó casi al final del acto, la dirigente Elba Esther Gordillo seguramente se habría alegrado del anuncio de aumentar en 700 escuelas al programa de tiempo completo, así como de escuelas multigrado, un proyecto largamente apuntalado por el SNTE porque ello representa aumentar su membrecía.

Para apuntalar la educación superior, uno de los temas que le tocará poner en marcha al nuevo secretario, además de brindar el respaldo a la UV, es el relativo a la creación de la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, sustentado (aunque con una dudosa calidad educativa) en el Instituto Veracruzano de Educación Superior (IVE).

El papel de Adolfo Mota como titular de la SEV será, sin duda, lograr que el proyecto no sólo abra múltiples oportunidades de educación profesional a los veracruzanos, sino que ésta sea de aclidad.






Los nuevos rostros de la educación


Y hemos dicho que el nuevo titular de la SEV deberá apuntalar su equipo cercano de colaboradores, con profesionistas capaces de dar golpes de timón en materia de innovación y calidad educativa, porque en los puestos formales de subsecretarios generalmente arriban personajes surgidos al calor de las negociaciones políticas.

Aunque al momento de escribir estas líneas no había confirmación oficial, prácticamente han sido definidos los funcionarios que estarán a cargo de las subsecretarías de la SEV.

En la subsecretaría de Educación Básica, era casi segura la incorporación del exdiputado local y exdirigente de la sección 32 del SNTE, profesor Fernando González Arroyo, quien había sido apuntalado para llegar al puesto que hoy ocupa quien durante su gestión como diputado federal propuso diversos puntos de acuerdo a favor de la educación en Veracruz. Sin embargo, varios consideraban que era posible que se mantuviera en el puesto la maestra Xóchitl Osorio.

Para nadie en la SEV es un secreto que la de Educación Básica es la única subsecretaría que cuenta con poder y manejo presupuestal.

De ahí que las otras dos carteras constituyan meros escaparates políticos.

A la subsecretaría de Educación Media Superior y Superior, en sustitución de Rafael Ortiz Castañeda, arriba Denisse Uscanga Méndez, quien una vez en el cargo constatará que le iba mejor en su anterior puesto como directora general de Bachillerato, al menos en lo que a manejo presupuestal se refiere.

Lo mismo le sucederá a Nemesio Domínguez Domínguez, exdiputado federal con una larga trayectoria política en el PRI, y administrativa en el DIF estatal, quien sustituirá a Domingo Alberto Martínez Reséndiz en la subsecretaría de Desarrollo Educativo, donde poco podrá hacer si no negocia adecuadamente el destino de recursos a proyectos que tienen que ver con la labor editorial y cívica de la SEV.

Hasta donde sabemos, las tareas relacionadas con la difusión de las tareas que desarrolle la SEV estará en manos de un viejo conocido nuestro, el periodista Arturo Reyes Isidoro, con mucha experiencia en la brega de la comunicación, quien sustituye a Rogelio Marín, quien realizó un extraordinario trabajo al lado del exsecretario Víctor Arredondo.